-Sí que tengo, sí, pero no llevo todo el día currando para darte mi tabaco ahora a ti.
-¿Cómo? Un respeto, vamos a llevarnos bien.
-Respeto yo a ti de qué, niñato de mierda.
Y poco después, un tío con una rodilla en la cara pidiendo perdón.
Estoy un poco cansado de que me pidan drogas legales por la calle, y que me pregunten si quiero comprar drogas ilegales. Y no, no fumo, pero si quería fumar ese individuo, tenía hierba en el parque.
Mi lógica, escrita, es aplastante.